martes, noviembre 17, 2009

La Morenita en Jaén

Miles de fieles se desplazaron, ayer, hasta la capital con un objetivo, admirar el rostro de La Morenita y celebrar el cincuentenario de su proclamación como patrona de la Diócesis de Jaén. La jornada, además, estuvo dedicada a todas las cofradías filiales de la provincia, que se dieron cita en la Catedral. Una grandiosa Virgen de la Cabeza volvió, ayer, a despertar la ilusión de miles de fieles que, entre llantos de alegría, se desplazaron hasta la Catedral.



La Morenita, rodeada de rosas blancas y con el manto que lució cuando fue recoronada, el 22 de abril de 1960, esperaba a sus devotos. Durante toda la jornada no faltaron las plegarias, los cánticos y las palabras de alabanza. Además, el pasado sábado, una vez que la Madre de Dios llegó hasta el templo mayor, los congregados le rezaron la salve, el santo rosario “por la vida humana” y se celebró una eucaristía.
Los propios jiennenses quedaron asombrados de la admiración que despierta la Señora. Hacía tiempo que la capital no vivía un acontecimiento similar. Por ello, desde bien entrada la mañana, la Plaza de Santa María se quedó “pequeña”. Las colas para acceder hasta la Catedral eran interminables, mientras que el casco histórico quedó inundado de autobuses y automóviles que, desde todos los puntos de la provincia e, incluso, de numerosos rincones de España acudían para contemplarla, aunque fuese unos pocos minutos. Por ello, un gran dispositivo de seguridad, colaboradores, organizadores y cofrades velaban por un correcto orden aunque, en ciertos momentos, sobre todo entrada la tarde, fue complicado.

Si el pasado sábado era el “gran día” para la Cofradía de la Virgen de la Cabeza de la capital, así como para las hermandades de Pasión y Gloria, ayer la jornada estuvo especialmente dedicada a las cofradías filiales, que lucieron sus estandartes, medallas y mejores atuendos. En fila, y mirando hacia la portada de la Catedral, las hermandades entraban por turnos a pedirle protección y salud para todos los que los rodean. Algunos, además, veían cumplidas alguna promesa que le realizaron hacía tiempo, mientras que muchos recordaban que la Virgen de la Cabeza se merece la Rosa de Oro que le impondrá el obispo, Ramón del Hoyo, el próximo domingo. “La distinción, que le concede el Papa Benedicto XVI, debe ser para ella, porque, aunque parezca pequeñita, es la más grande”, aseguraban los devotos. A nadie se le escapaba que, este año, no sólo se celebra el cincuentenario de su proclamación como patrona de la Diócesis de Jaén y el centenario de su coronación. También recordaban que la Rosa de Oro la llevará La Morenita, que no existe otra imagen mariana de todo el país que la tenga y que, precisamente, esta distinción la hace mucho más valiosa.
devoción. Por otro lado, las filiales se mostraban orgullosas de poder celebrar una misa en la Catedral, en la que el centro fuese la patrona de Andújar y, además, estuviese junto a otra de las imágenes más veneradas de la provincia, la de Nuestro Padre Jesús Nazareno. En primer lugar, le tocó el turno a las hermandades de Alcalá la Real, Marmolejo, Higuera de Calatrava, Sabiote, Castillo de Locubín, Alcaudete, Jódar, Santiago de Calatrava, La Carolina, Torres y Baeza. A continuación se sentaron frente a La Morenita las cofradías de Arjonilla, Lopera, Arjona, Bailén, Noalejo, Campillo de Arenas, Carchelejo, Valdepeñas de Jaén y Torreblascopedro. Hubo una última eucaristía, en las que estuvieron presentes las de los municipios de Martos, Jaén, Torredonjimeno, Mancha Real, Mengíbar, Lahiguera, Jamilena, Fuerte del Rey, Cazalilla, Los Villares y Villargordo.

Fuente: Diario Jaén

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Yo tuve la oportunidad de poder estar allí y ha sido una experiencia inolvidable, además de contemplar un hecho histórico.

Recomendaría a todo el que pudiese que visitase Jaén en estos días, y, sobre todo, el domingo día 22 de noviembre.

Anónimo dijo...

Hay un pero y es que cuando vas a la catedral a visitar a la Virgen de la Cabeza, lo tinen todo acordonado de tal forma que no se puede ver de frente, solo de lado y hay gente mayor que van expresamente a visitarla y salen decepcionados.